Para averiguar si una página es fraudulenta podemos analizar los siguientes elementos:
- Dominio y dirección URL: verifica que la URL es correcta, busca errores ortográficos (Amaz0n), guiones u otros signos o símbolos en el nombre del dominio.
- Extensión de dominio. “.info” y “.biz” son internacionales, muy intuitivas y están libres de restricciones (están abiertas a todos los sitios) por lo que no son muy fiables. “.com” y ”.net” son fáciles de obtener por lo que no tienen la misma fiabilidad que “.edu” (institución educativa), “.gob” (institución gubernamental) o “.eu” (Unión Europea) o los de países. Hay que tener un cuidado especial con el dominio “.org” ya que la tenencia de este dominio no implica que se sea una organización sin ánimo de lucro. Si alguna página resulta sospecha existen servicios denominados “whois” que indican a quién pertenece el dominio y cuándo fue registrado.
- Tipo de conexión. La etiqueta “https” es más segura y confiable que “http” pues la gran mayoría de los sitios fraudulentos o ilegítimos no se molestan en seguir el proceso para conseguir la certificación de seguridad.
- Estado de seguridad (el candadito verde a la izquierda en la barra de direcciones) también es importante. Si se hace clic se despliega un menú con detalles como el tipo de cifrado usado.
- Certificado digital por el que un tercero de confianza garantiza que la página web es de la entidad.
- Escribe la dirección en un buscador y observa los comentarios de los usuarios.
- Instalar filtros antifraude en el navegador.
- Consultar el informe de transparencia de Google.
- Contenido: desconfía de las páginas con muchos errores ortográficos, frases forzadas o sin sentido. También si contiene promociones, informaciones u ofertas demasiado buenas para ser verdad, no se actualiza con regularidad o no es citada por otros sitios ni muy enlazada.
- Verifica que se facilitan los datos de contacto y los datos de la empresa o personas citadas.
- Acudir al caché de Google o a archive.org para revisar las versiones anteriores de la página por si ha sido modificada o alterada.
- Si dudas de que el contenido sea original puedes copiar un fragmento y pegarlo en la caja de búsqueda de tu buscador o pasarlo por programas para detectar el plagio.
- Código fuente HTML: las palabras clave contenidas nos indican las intenciones de la página web.
Basado en: https://www.biblogtecarios.es/inmaherrero/como-verificar-la-legitimidad-de-un-sitio-web/
